Carmignac Patrimoine se revalorizó un 7,28 % en el cuarto trimestre, frente al +4,20 % de su índice de referencia. Así, la rentabilidad del Fondo en la totalidad de 2020 asciende a +12,40 %, frente al +5,18 % de su índice de referencia.
En nuestro informe anterior, escribíamos: «Una victoria del Partido Demócrata en la Casa Blanca y el Senado facilitaría la aplicación de un programa de estímulo plurianual de gran calado orientado a la demanda». Esta victoria ahora se ha materializado y ha sentado las bases para la adopción de un enfoque más keynesiano con tres componentes principales: un programa de infraestructuras vinculado a la transición energética, la redistribución de la riqueza a la clase media —con políticas que abarcan la educación y la sanidad— y una mayor regulación para las grandes firmas tecnológicas. Las autoridades estadounidenses abordarán estas cuestiones con el tiempo, dado que la pandemia requiere ahora un nuevo paquete de ayuda que incluya cheques para los hogares con rentas bajas, la ampliación de las prestaciones por desempleo y ayudas para los Gobiernos estatales canalizadas a escala federal. Entretanto, en diciembre el Banco Central Europeo satisfizo las expectativas de mercado en cuanto al tamaño de las medidas adicionales de relajación cuantitativa. La entidad ha ampliado su programa de compras de activos durante quince meses más para cubrir una voluminosa oferta de bonos que previsiblemente se mantendrá hasta el primer trimestre de 2022 y se ha comprometido a «preservar unas condiciones de financiación favorables». A partir de ahora, el BCE actuará en mayor medida para mantener los rendimientos en niveles estables que para reducirlos.
El apoyo continuado de los bancos centrales y los Gobiernos ha seguido fomentando la recuperación de la renta variable. Esta se ha visto impulsada por los valores de crecimiento desde los niveles mínimos alcanzados en marzo. No obstante, en los últimos meses del año, los títulos de valor repuntaron con fuerza, tanto en el universo desarrollado como en el emergente. De hecho, las noticias sobre las vacunas contra la COVID-19 en noviembre hicieron las veces de catalizador adicional para los mercados. Los títulos que más rezagados quedaron en buena parte de 2020, principalmente aerolíneas, bancos y compañías energéticas, repuntaron con fuerza gracias a estas noticias y redujeron parte de la rentabilidad inferior que presentaban frente a sus homólogos de crecimiento.
Durante el trimestre, en el componente de renta variable, el Fondo se benefició de su amplia exposición geográfica, que presenta una gran diversificación. En particular, nuestras sólidas convicciones en China registraron importantes ganancias que nos llevaron a batir a nuestro índice de referencia. Asimismo, nuestro enfoque de inversión centrado en el crecimiento a largo plazo siguió dando sus frutos, como demuestran nuestras ganancias en los sectores de la tecnología, la salud y el consumo. En estos sectores, pudimos generar un alfa considerable gracias a algunas de las temáticas a largo plazo en las que nos centramos. Entre ellas, se encuentra el cambio climático, que nos instó a invertir en empresas de vehículos eléctricos y productores de baterías, en particular en China. Por último, en los meses de abril y mayo incorporamos títulos que, en nuestra opinión, se habían visto sumamente penalizados con la crisis, pero que se beneficiarían de la reapertura gradual de las economías. Entre estos, cabe destacar a Amadeus, un proveedor español de tecnologías de la información para el sector mundial de los viajes y el turismo, y Safran, un fabricante de motores de aviones centrado en los vuelos turísticos de corta distancia. Estas posiciones nos permitieron mitigar el impacto de la recuperación de los títulos de valor hacia finales de año.
En la partida de renta fija, también nos beneficiamos de esta recuperación de los títulos de valor a través de nuestras posiciones en crédito en sectores cíclicos. En respuesta a las condiciones generales del mercado, establecimos posiciones cortas en la duración modificada de nuestra cartera de renta fija a finales de año. Asimismo, efectuamos movimientos para otorgar una mayor ponderación a los vencimientos a medio plazo (protegidos por unos rendimientos que, según prevemos, se mantendrán estables tanto en Europa como en EE. UU.), así como a los bonos corporativos y bancarios que ofrezcan unos diferenciales lo suficientemente elevados como para amortiguar un incremento de los tipos de interés. En EE. UU., iniciamos coberturas crediticias en el tramo largo de la curva de rendimientos (30 años) y en los bonos del Tesoro protegidos frente a la inflación. Creemos que el segmento del crédito sigue ofreciendo mucho valor y, sobre todo, dispersión. En conjunto, si bien los diferenciales se han ajustado de forma notable en los últimos meses, algunos de los sectores anteriormente mencionados siguen albergando potencial de revalorización y rentabilidades interesantes.
El dólar estadounidense cayó cerca de un 9 % frente al euro durante 2020 y su trayectoria descendente bien podría continuar, dado que prevemos que el doble déficit estadounidense (comercial y presupuestario) debilitará al billete verde a largo plazo. Por tanto, cubriremos nuestra exposición a la moneda estadounidense. En cambio, el yuan se ve respaldado por unos sólidos fundamentales. China presenta una situación de superávit comercial, muestra una verdadera fortaleza competitiva y en la práctica ofrece los tipos de interés reales más elevados del mundo. Así pues, además de nuestra exposición al euro, estamos posicionados para beneficiarnos de una revalorización de la divisa china.
A largo plazo, creemos que los valores de crecimiento con un horizonte amplio, que encontramos en el sector de las tecnologías e Internet, así como en el de la salud y el consumo, seguirán registrando una evolución positiva debido a sus perspectivas de crecimiento y modelos de negocio superiores. No obstante, mantenemos la prudencia en cuanto a los títulos con valoraciones elevadas y recogimos beneficios en los principales beneficiarios de la economía del confinamiento y en los valores chinos.
Según parece, tres temáticas clave darán forma a los acontecimientos en 2021:
Carmignac Patrimoine | 3.9 | 0.1 | -11.3 | 10.5 | 12.4 | -0.9 | -9.4 | 2.2 | 7.1 | 3.3 |
Indicador de referencia | 8.1 | 1.5 | -0.1 | 18.2 | 5.2 | 13.3 | -10.3 | 7.7 | 11.4 | 1.7 |
Carmignac Patrimoine | + 3.1 % | + 3.1 % | + 0.7 % |
Indicador de referencia | + 4.2 % | + 5.7 % | + 5.3 % |
Fuente: Carmignac a 28 de feb. de 2025.
Las rentabilidades históricas no garantizan rentabilidades futuras. La rentabilidad es neta de comisiones (excluyendo las eventuales comisiones de entrada aplicadas por el distribuidor)
Indicador de referencia: 40% MSCI AC World NR index + 40% ICE BofA Global Government index + 20% €STR Capitalized index. Reponderato trimestralmente.
*Escala de riesgo del KID (Documento de datos fundamentales). El riesgo 1 no implica una inversión sin riesgo. Este indicador podría evolucionar con el tiempo. **